Tos perruna
La tos laríngea, a pesar de lo alarmante que parece, no suele implicar gravedad.
Posible causa
Su
origen suele ser una laringitis espasmódica, una infección vírica que
da lugar a una inflamación de la laringe y que se cura sola.
Qué hacer
Desaparece sola.
- Si nos alarmamos y llevamos al niño a urgencias, lo más probable es que al llegar no quede ni rastro de la terrible tos que nos hizo salir corriendo.
- Sacar al niño o bebé unos minutos al fresco de la noche (a la ventana o a la terraza, convenientemente abrigado) es una de las opciones caseras para afrontar los ataques de tos nocturna.
- Si la tos no cede y empeora, el médico nos recetará esteroides inhalados o corticoides por vía oral.
Cuándo preocuparnos
La
laringitis dura entre tres y cinco días. Si la tos perdura, va
acompañada de fiebre prolongada o afectación del estado general, debemos
llevar al niño al médico cuanto antes.
Tos húmeda
Esta
tos es densa, lenta y empeora considerablemente por la noche. La nariz
puede aparecer seca, pero por el sonido de cada tos sabemos que todos
los mocos están ahí, en el pecho de nuestro hijo.
Posible causa
La tos húmeda indica secreciones bronquiales en los alveolos (pequeños
sacos de aire de los pulmones) y se relaciona con procesos infecciosos.
Hay que mantenerse alerta ante otros síntomas: dificultad para respirar, fiebre alta persistente, fatiga o pérdida del apetito nos avisan de algo más serio como una gripe, una bronquiolitis, una respuesta asmática o una neumonía. Suele requerir un tratamiento de fondo.
Hay que mantenerse alerta ante otros síntomas: dificultad para respirar, fiebre alta persistente, fatiga o pérdida del apetito nos avisan de algo más serio como una gripe, una bronquiolitis, una respuesta asmática o una neumonía. Suele requerir un tratamiento de fondo.
Qué hacer
Como esta tos apunta a un proceso infeccioso, es imprescindible su evaluación por parte del médico.
- Denota mucosidad en el pecho y en estos casos es aconsejable enseñar a los niños a expectorar, es decir, a expulsar los mocos tras cada tos.
- Los líquidos le ayudarán a hacer los mocos más fluidos.
- Los jarabes contra la tos están menos indicados que nunca.
Tos seca
El
niño tiene muchos mocos en la nariz, quizá también fiebre, y una tos
seca, irritativa, ronca... Esta tos y los síntomas que la acompañan
pueden mantenerse invariables una semana o pueden empeorar en unos días.
Posible causa
La
mayoría de las veces la tos seca es parte de un catarro y está
provocada por la inflamación de la faringe. Aunque sea llamativa, si va
acompañada de muchos mocos y fiebre que remite en dos o tres días, no
suele ser preocupante.
Qué hacer
Si
al niño le duele mucho la garganta al toser, es posible que le
prescriban antiinflamatorios. Tanto el resfriado como la gripe se curan
solos, sin necesidad de medicación, con reposo y tranquilidad si el niño
está abatido. La tos desaparecerá sola en unos días.
Tos ferina
Nuestro
hijo pequeño tiene fuertes ataques de tos, cada pocos minutos, que lo
dejan sin aliento. Esta tos suele acompañarse de un esputo blanco,
perlado, pero no muy grande. Los pequeños pueden vomitar del esfuerzo y
los menores de tres meses, incapaces de toser tanto, realizan pausas de
apnea (se quedan sin respiración durante unos segundos). Se trata de una
tos seca, irritativa y bastante invalidante.
Posible causa
Está provocada por una infección bacteriana originada por la Bordetella Pertussis,
una bacteria muy contagiosa contra la que se vacuna a los bebés desde
los dos meses. Gracias a las vacunas hoy no es fácil ver la enfermedad
en estado puro, pero no todos los niños están inmunizados y además
existe una generación de adultos y adolescentes mal vacunados que puede
contagiar la enfermedad a los más pequeños.
Qué hacer
Si
la tos de nuestro hijo (que achacamos a un resfriado) empeora después
de unos días y empieza a parecerse a la descrita, es primordial acudir
rápidamente al médico.
- Aunque se trata de una enfermedad que, en general, va a curarse sin medicación, es importante controlar la evolución del niño.
- Hay ocasiones en las que puede requerir el uso de antibióticos, y es una de las pocas enfermedades que puede justificar el uso de jarabes contra la tos (antitusígenos).
- La enfermedad en sí suele curarse relativamente pronto con el tratamiento adecuado, pero la tos de recuerdo puede durar meses: la tos ferina afecta a los receptores de la tos, en el sistema nervioso central.
Tos con pitos
Cada vez que nuestro hijo tose, o incluso respira, parece estar soplando por un pito que suena dentro de su pecho.
Posible causa
El
origen de esta tos es el «cierre bronquial», y es típica de procesos
asmáticos y bronquiolitis. Si la tos se da en invierno y en niños
menores de dos años es probable que estemos ante una bronquiolitis; si
aparece en primavera podemos sospechar una alergia. El asma no tiene
edad, aunque es más habitual en niños mayores.
Qué hacer
Lo
primero es acudir a un especialista para establecer un diagnóstico. Los
tratamientos son diferentes en función de la causa. Si a nuestro hijo
le diagnostican asma es importante hacer un plan preventivo. Si
finalmente se llega al ataque de asma, este se resuelve con
broncodilatadores, esteroides inhalados y antileucotrienos, inhibidores
de las sustancias que provocan el cierre de los bronquios.
Las bronquiolitis son más complejas de tratar, ya que están causadas
por el virus respiratorio sincitial, que no siempre responde
adecuadamente a un tratamiento. En realidad la bronquiolitis solo se
pasa una vez en la vida, como el sarampión; el resto de las veces que
creemos estar ante la enfermedad estamos ante cuadros relacionados con
el primer episodio.
Tras la bronquiolitis los pulmones del niño suelen quedar muy
sensibles, por lo que responden exageradamente ante cualquier cuadro
vírico sin importancia. Entre los cuatro y los seis años los pulmones
maduran y no suelen quedar secuelas. Si la tos de estos episodios es
demasiado molesta, el médico recetará un broncodilatador.
Tos por cuerpo extraño
Nuestro
hijo no tiene otros síntomas como congestión o fiebre, pero sufre una
tos constante y persistente, que no para nunca. La constante no
desaparece nunca, ni de día, ni de noche, ni de un día para otro; la
persistente aparece y desaparece, puede que con apenas un día de
diferencia, y tiene su origen en procesos víricos repetidos.
Posible causa
Ante
una tos persistente podemos sospechar sobre todo la presencia de un
cuerpo extraño alojado en los pulmones del niño. Puede haberlo
introducido por la nariz, pero también por la boca. Los cacahuetes y las
pipas son los cuerpos extraños que se encuentran con más frecuencia en
los pulmones de los niños pequeños. Cuando no conocemos el origen de la
tos no debemos darle nunca antitusígenos.
Qué hacer
Si
nuestro hijo tose persistentemente sin causa aparente, debemos llevarlo
al médico, quien puede pedir una radiografía para averiguar si tiene un
cuerpo extraño (este no siempre se ve). Una vez detectado, se lo
extraerán con un broncoscopio.
Tos nerviosa
La tos nerviosa o psicógena es una tos seca, irritativa, que no tiene por finalidad expulsar moco.
Posible causa
Puede tener en su origen una situación de estrés. Puede ser crónica (durar varias semanas) y es más común en los adultos.
Qué hacer
Cesa sola por la noche, cuando el niño está relajado, síntoma que la dierencia de una tos relacionada con una enfermedad.
Autor
Lidia García-Fresneda
Asesor
Dr. Javier Pérez Frías, neumólogo infantil y profesor titular de Pediatría de la Universidad de Málaga
Lidia García-Fresneda
Asesor
Dr. Javier Pérez Frías, neumólogo infantil y profesor titular de Pediatría de la Universidad de Málaga
Muy buen articulo y remedios para la tos ya utilizare algunos con mi niña
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