Ir al contenido principal

Los caramelos, perritos calientes o frutos secos son los alimentos que más atragantamientos provocan a los niños

MADRID, 29 Jul. (Reuters/EP) -
   Los caramelos, perritos calientes o los frutos secos son los alimentos que más atragantamientos provocan a los niños, según ha mostrado un equipo de investigadores estadounidenses que durante la última década han estudiado a 12.435 niños menores de 14 años que visitaron a las salas Urgencias tras atragantarse con la comida.
   En este sentido, los expertos han mostrado que el 38 por ciento de los menores de un año de edad que tuvieron un atragantamiento fue por la leche materna y, a nivel general, que el 40 por ciento sufrió este episodio tras ingerir caramelos, carne, huesos, frutas y verduras.
   Asimismo, la investigación, publicada en 'Pediatrics', ha mostrado que los niños que comen perritos calientes, semillas o frutos secos son dos o tres veces más propensos a ser hospitalizados por atragantamiento que aquellos que han consumido otro tipo de comida.
   "Los perritos calientes tienen prácticamente la misma forma y tamaño que las vías respiratorias de los niños, por lo que pueden bloquerlas y producir un atragantamiento. Además, las semillas y los frutos secos son también alimentos muy difíciles de tragar, especialmente si los niños se colocan muchos en la boca para tragar de una sola vez", ha comentado el investigador del Hospital Nacional de Niños en Ohio (Estados Unidos). Gary Smith.
   Ahora bien, en el estudio no se ha incluido a los niños que fueron tratados en Urgencias, por un médico de Atención Primaria o que tuvieron un incidente de asfixia grave pero que fueron capaces de expulsar la comida por sí solos. "Esto ha sido sólo una subestimación", ha argumentado el experto.
   Por otra parte, Smith ha asegurado que los incidentes de asfixia podrían prevenirse con un "mejor diseño" y correcto etiquetado de los alimentos y, principalmente, con una "mayor" supervisión de los padres en el momento en el que el niño está comiendo.
   "Hay que asegurarse siempre de que los alimentos están cortados en trozos suficientemente pequeños. Por ejemplo, las uvas hay que cortarlas a la mitad para los niños más pequeños", ha zanjado el doctor del Hospital Niños en Wilmington (Estados Unidos), James Reilly, quien no participó en el estudio.
EUROPAPRESS, 29/07/2013

Comentarios

Entradas populares de este blog

«Los buenos modales no están de moda, pero es imprescindible recuperarlos»

FERNANDO CONDE Hoy en día es frecuente enterarte por los medios de noticias relacionadas con la falta de respeto, el maltrato, el acoso, etc. Podemos observar muchas veces la ausencia de un trato adecuado a los ancianos, la agresividad incontrolable de algunos hinchas de fútbol; la poca estima a la diversidad de opiniones; la destrucción del medio ambiente; el destrozo del mobiliario urbano y un largo etcétera que conviene no seguir enumerando para no caer en el pesimismo que no conduce a nada y el problema seguirá ahí. Un problema que podríamos resumir en que se ha ido perdiendo el valor de la dignidad humana en general. Los modos para alcanzar la felicidad, siempre deseada, se apartan de las reglas y normas de conducta más elementales de convivencia colectiva que han acumulado las culturas y los pueblos a través de los siglos. La idea de que «la dignidad empieza por las formas» que resume este artículo es una afirmación bastante cierta, porque la forma, no pocas veces arrastr

Qué le pasa a tu bebé cuando dejas que llore sin parar

  GINA LOUISA METZLER Muchos padres creen que es útil dejar llorar a su bebé. La sabiduría popular dice que unos minutos de llanto no le hacen daño, sino que le ayudan a calmarse y a coger sueño. Se trata de la técnica de la espera progresiva , que fue desarrollada por el doctor Richard Ferber, neurólogo y pediatra de la Universidad de Harvard en el hospital infantil de Boston (Estados Unidos) , y que sigue utilizándose en la actualidad en todo el mundo. Casi nadie sabe en realidad lo que ocurre a los bebés cuando siguen llorando, pero las consecuencias físicas y psíquicas podrían afectarles toda su vida. Cuando un bebé llora sin que sus padres lo consuelen, aumenta su nivel de estrés , ya que, a través de su llanto, quiere expresar algo, ya sea hambre, dolor o incluso necesidad de com

¿Qué hay detrás de las mentiras de un niño?

ISABEL SERRANO ROSA Los niños no son mentirosos, pero mienten . Lo hacen cuando tienen algo que decir o que aprender. Hasta los cuatro años, con sus historietas sorprendentes, quieren narrarnos su mundo de fantasía. Somos la pantalla en la que proyectar su película. Entre los cuatro y los siete años construyen su mini manual de moralidad con ideas muy sencillas sobre lo que está bien y mal, basado en sus experiencias "permitido o no permitido " en casa y en el colegio. Con su gran imaginación, las mentiras son globos sonda para saber hasta dónde pueden llegar. Entre los ocho y los 12 años la realidad se abre camino y la fantasía se vuelve más interesada.  El pequeño pillo de nueve años desea ser bueno, pero se le escapan las trolas por el deseo de gustar a los demás, ocultar alguna debilidad o evitar castigos. En general, mienten a sus crédulos coetáneos o, por el contrario, les escupen a la cara alguno de sus descubrimientos del trabajo de campo que significa crecer.