Ir al contenido principal

Los abuelos, más permisivos con sus nietos

S.F. / MADRID

El cariño, la compañía y la complicidad son las características que suelen caracterizar las relaciones entre los abuelos y sus nietos. El II Estudio sobre la importancia del papel educador de los abuelos en la vida de sus nietos, elaborado por Imaginarium entre socios de cuatro países diferentes, aporta datos muy interesantes a este respecto.
Los abuelos españoles tienen una media de 2 nietos; el 66,6% vive en la misma ciudad, y el 40,5% comparte con ellos una media de entre 5 y 7 días a la semana (dato que ha disminuido en cuatro puntos respecto al primer estudio). El 36% pasan con sus nietos el tiempo que quieren y cuando quieren y sólo el 10% ve limitada la relación a vacaciones y festividades.
El 50% reconoce que son más permisivos que con sus hijos; al 42% les gustaría fomentar que los pequeños fueran niños durante más tiempo; y al 32% les encanta sentarse con los pequeños y aprender con ellos el uso de las nuevas tecnologías.

Es responsabilidad de los padres educar

Francisco Muñoz, presidente de la Asociación de Abuelas y Abuelos de España, asegura que son los padres los que deben educar a los hijos y en ningún caso esta debe ser una función de los abuelos. Cree que aportan valores, son una guía para los niños, ofrecen su cariño y afecto e incluso conforman un referente para sus propios hijos, pero destaca que «deben dejar a los padres la labor de educar y, en caso de conflicto conversar, pero dejando siempre la iniciativa a los padres».
El 50% declara que son sus propios hijos los que deben educar con mayor disciplina, mientras que ellos se permiten más licencias y les conceden más caprichos; el 34% reconoce que antes los niños se divertían con menos juguetes y con más creatividad; el 25% considera que los pequeños en algunas ocasiones sufren estrés y un 29% indica que ahora juegan más con la tecnología.
El 49% de los padres aseguran que a los abuelos no les importa que sus nietos utilicen las nuevas tecnologías siempre que los tiempos estén controlados; el 35% observa que los abuelos usan los juguetes que tienen en casa y el 26% aprovecha este momento para enseñarles juegos de su infancia.

El apoyo y cariño de los abuelos

Sólo al 5% les produce algo de estrés hacerse cargo de sus nietos y entre las actividades que más realizan cuando están juntos destacan: pasear, ir al parque, jugar y leer cuentos, aunque también se encargan de realizar otras tareas, como: ir a buscarles al colegio, prepararles la merienda o la cena, y hacer los deberes.
Para más del 80% de los padres, el rol de los abuelos es de gran ayuda en casa y reconocen que estos disfrutan más en esta etapa que cuando ellos fueron padres. Así mismo, valoran la gran ayuda que les prestan en la educación de sus hijos (84%) y declaran que lo que más aportan en la relación con sus nietos es el tiempo que juegan juntos (37%), amor (33%), diversión (27%) y aprendizaje (19%).
ABC, 27/07/2013

Comentarios

Entradas populares de este blog

«Los buenos modales no están de moda, pero es imprescindible recuperarlos»

FERNANDO CONDE Hoy en día es frecuente enterarte por los medios de noticias relacionadas con la falta de respeto, el maltrato, el acoso, etc. Podemos observar muchas veces la ausencia de un trato adecuado a los ancianos, la agresividad incontrolable de algunos hinchas de fútbol; la poca estima a la diversidad de opiniones; la destrucción del medio ambiente; el destrozo del mobiliario urbano y un largo etcétera que conviene no seguir enumerando para no caer en el pesimismo que no conduce a nada y el problema seguirá ahí. Un problema que podríamos resumir en que se ha ido perdiendo el valor de la dignidad humana en general. Los modos para alcanzar la felicidad, siempre deseada, se apartan de las reglas y normas de conducta más elementales de convivencia colectiva que han acumulado las culturas y los pueblos a través de los siglos. La idea de que «la dignidad empieza por las formas» que resume este artículo es una afirmación bastante cierta, porque la forma, no pocas veces arrastr...

¿Qué hay detrás de las mentiras de un niño?

ISABEL SERRANO ROSA Los niños no son mentirosos, pero mienten . Lo hacen cuando tienen algo que decir o que aprender. Hasta los cuatro años, con sus historietas sorprendentes, quieren narrarnos su mundo de fantasía. Somos la pantalla en la que proyectar su película. Entre los cuatro y los siete años construyen su mini manual de moralidad con ideas muy sencillas sobre lo que está bien y mal, basado en sus experiencias "permitido o no permitido " en casa y en el colegio. Con su gran imaginación, las mentiras son globos sonda para saber hasta dónde pueden llegar. Entre los ocho y los 12 años la realidad se abre camino y la fantasía se vuelve más interesada.  El pequeño pillo de nueve años desea ser bueno, pero se le escapan las trolas por el deseo de gustar a los demás, ocultar alguna debilidad o evitar castigos. En general, mienten a sus crédulos coetáneos o, por el contrario, les escupen a la cara alguno de sus descubrimientos del trabajo de campo que significa crecer....

El tabú de estar desnudo en casa delante de los hijos

NATALIA LÓPEZ PEVIDA El encuadre no recogía más que algunos juguetes y dos caras, las de un padre y su  hijo  disfrutando de un buen baño, pero las críticas no se hicieron esperar cuando el bloguero y activista LGTBI Perez Hilton subió la fotografía a Instagram (imagen del artículo). El  selfie  solo podía ser el fruto de un " pervertido " o un " degenerado ", según algunas de las reacciones de quienes expresaron su horror ante la posibilidad de que el niño pudiese ver el cuerpo desnudo de su padre. Días después, Hilton zanjaba el tema declarando que se había duchado con el bañador puesto. ¿Por qué tuvo que justificarse? La desnudez paterna da lecciones que no todos entienden Mostrarse desnudo ante los hijos es un asunto delicado que cada familia gestiona a su manera, pero el choque entre las distintas perspectivas revela un oscuro tabú.  Hay un punto de vista que enfoca la exhibición del cuerpo humano como algo indigno , probablemente una herencia d...