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Ocho claves a tener en cuenta al conducir hasta el cole

EL MOTOR
¿Cuánto tiempo ha pasado? ¿Casi tres meses? Algo así. Desde finales de junio, tus hijos y tú no habéis vuelto a hacer ese viaje rutinario del punto A al punto B, de casa al colegio. Pero ese desplazamiento va a volver a ocupar su lugar en la agenda de la familia. Y por eso quizá convenga repasar unos cuantas normas y pautasrelacionadas con la seguridad vial para que esa ruta sea lo más cómoda posible. Esto es todo lo que tienes que recordar ahora que toca volver al cole. Empezando por lo básico.

ERES SU EJEMPLO: CUMPLE LAS NORMAS

No debería hacer falta recordarlo, y tampoco quiere decirse que en este caso sí debas cumplirlas y en otros no. Pero este viaje que te obliga a compartir diariamente el coche con ellos es la mejor ocasión para mostrarte ante él como una persona prudente, observante de las normas y modélico en tu forma de conducir. Para evitar prisas, procurad salir con tiempo de casa y jamás adoptes posturas coléricas. No olvides que eres su ejemplo.

LAS MOCHILAS, AL MALETERO

Porque lo habitual es que las lleven en el interior del habitáculo, junto a ellos. Mala idea: cualquier objeto suelto dentro del coche (y esto se hace extensivo por tanto a juguetes y otros accesorios) supondrá un peligro en caso de colisión, puesto que se convertirá en un proyectil. Además, pueden ser poderosos elementos de distracción que te despisten de la conducción y, por tanto, una fuente segura de problemas.

LAS SILLAS DE RETENCIÓN

Ya hemos repasado cuáles son las pautas y parámetros que debemos atender para elegirlas, y quizá haya llegado el momento de sustituirlas. Verifica, si hace tiempo que no lo haces, que los sistemas de retención que utilizan tus hijos se ajustan a su estatura y a su edad.

SIEMPRE CON EL CINTURÓN

Les resulta incómodo, no les gusta y, a veces, se ponen muy pesados y pelean por quitárselo, algo que jamás se les debe permitir. Es imprescindible que lo lleven puesto y bien ajustado, aunque de tu casa al colegio tan solo haya un par de manzanas. Recuerda también que, dentro de poco, comenzarán a llevar abrigos y prendas más gruesas, y que será preferible quitárselas para que queden bien sujetos.

MEJOR EN LOS ASIENTOS TRASEROS

Los pequeños que miden menos de 1,36 metros deben viajar siempre en el asiento trasero del coche y en una silla homologada. Tan solo podrán acompañarte delante cuando los traseros estén ya ocupadospor otros niños con menor estatura, siempre con un sistema de retención, o en el caso de que tu vehículo sea biplaza. Si no, atrás. Aunque les encante viajar a tu lado y observar la calle desde la vista panorámica del copiloto.

APARCAR EN ZONAS HABILITADAS

El entorno de los centros escolares se convierte en un hervidero de niños, de coches y de autobuses. Por eso, tienes que asegurarte de aparcar en zonas habilitadas y evitar hacerlo en doble fila o en una zona de demasiada afluencia de vehículos. Los niños saldrán disparados del coche, se encontrarán con otros niños y dejarán de prestar atención a lo que tienen a su alrededor. Por eso, será mejor que se apeen del coche en zonas seguras.

Y SIEMPRE BAJAR POR EL LADO DE LA ACERA

Da igual que le puedan las prisas, que creas que no hay peligro o que hayáis comprobado que no se acerca ningún otro conductor. Antes de llevarse un susto o de lamentar algún problema mayor, será preferible siempre se apeen del coche por el lado de la acera.

SI VAS EN MOTO…

Sin duda, tu hijo podrá presumir de tener un padre o una madre motorista. Eso es ya un punto a favor, pero debes tener en cuenta otras cuestiones específicas que se suman a las generales de respetar las normas y aparcar en zonas habilitadas.
Sabrás que tu hijo debe tener más de 7 años para acompañarte en la moto, o más de 12 en el caso de que no seas su padre o tutor legal. Sabido esto, será buena idea que confíes en accesorios como baúles con respaldo incorporado o asientos para menores, que garantizarán que mantienen la postura correcta.
Además, tendrás que describir las maniobras con suavidad, pensando en que los pequeños no tienen tanta fuerza ni unas extremidades tan largas para aferrarse a tu cuerpo. El casco deberá ser homologado y tendrá que estar bien ajustado a su cabeza, dado que uno de mayor tamaño, además de resultarle incómodo, no garantizará su seguridad.
Son consejos sencillosbásicos y, muchos de ellos, obvios eirrenunciables. Pero hay que tenerlos presentes. Así que cuando dejes a tu hijo con una mezcla de sueño y de ilusión en la puerta del colegio, no los olvides. Por tu hijo y por los de los demás.
EL PAÍS, Martes 11 de septiembre de 2018

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