Ir al contenido principal

Se puede aprender durante el sueño

RAQUEL MARÍN 

Neurocientífica. Profesora de Fisiología en la Universidad de La Laguna (Tenerife)
Dormir es vital para el funcionamiento de la mente, hasta el punto de que la privación del sueño puede ser desencadenante de patologías. Además de las diversas actividades que realiza el cerebro mientras dormimos, como la gestión de los recuerdos, las investigaciones recientes demuestran que la memoria se puede potenciar durante el sueño.
Quizás en un futuro cercano, dormir sirva también para aprender y memorizar cosas nuevas y levantarnos con información que no teníamos antes de irnos a la cama.

Dormir para tener salud mental

En un artículo de mi blog comento lo importante que es el sueño para gestionar los recuerdos y la actividad de las neuronas. Es esencial para asegurar el correcto funcionamiento de la mente. Muchas disfunciones relacionadas con la atención, el lenguaje, el razonamiento, la capacidad de tomar decisiones, el aprendizaje y la memoria son consecuencia de privarse de dormir. Ello no quiere decir que el sueño aumente nuestra inteligencia, ni las capacidades de la mente.
Sin embargo, existen técnicas innovadoras efectivas para impulsar el conocimiento cuando estamos despiertos, como fármacos, estimulación cerebral o prácticas de meditación. ¿Por qué no buscar otras estrategias para estimular la memoria durante el sueño?

Estimular el conocimiento mientras se duerme

Las nuevas revolucionarias estrategias intentan conseguir impulsar la memoria e, incluso, aprender nuevas cosas durante la fase de sueño. Para ello, manipulan electroquímicamente el cerebro para reactivar la memoria, estimulan oscilaciones del cerebro específicas del sueño y usan sistemas para aumentar la producción de neurotransmisores, esas moléculas químicas que las neuronas producen para comunicarse entre ellas.
Para ello se proponen dos estrategias:
  1. Optimizar el sueño mientras se aprende. Por ejemplo, hacer pequeñas siestas antes de aprender nueva información aumenta la adquisición de nuevos circuitos de memoria. Lo mismo ocurre para consolidar recuerdos frescos recientemente adquiridos.
  2. Más intrigante es que se puede también aumentar la memoria manipulando directamente el cerebro durante el sueño. Para ello se utilizan manipulaciones de sistemas de neurotransmisión o de oscilaciones del cerebro. Se trataría de un "aprendizaje inducido".

Inducir nuevos aprendizajes por el olfato

Un grupo de investigadores alemanes desarrolló un estudio fascinante que demostró que los recuerdos de localizaciones de objetos se pueden reactivar durante el sueño exponiendo a las personas a olores específicos asociados a ellos.
Para ello, los participantes aprendían la ubicación de cosas asociadas a un olor. Posteriormente, los participantes se volvieron a exponer a esos aromas durante la fase del sueño de ondas lentas, mientras que otros participantes no se exponían. Los resultados demostraron que las personas expuestas a los olores mientras dormían recordaban mejor la ubicación de esos objetos. Sin embargo, como se demostró en otro trabajo, curiosamente esta estrategia solo funcionaba en adultos y no en niños.

Aprender durante la siesta

Un nuevo estudio efectuado en la Universidad de Bern (Suiza) ha conseguido que un grupo de participantes aprendiera palabras nuevas durante el sueño
Para ello, los voluntarios escuchaban por unos auriculares una serie de palabras por pares (reales e inventadas) que les iban diciendo mientras se echaban una siesta. Al mismo tiempo, se monitorizaba por electroencefalogramas las ondas cerebrales. Cuando despertaron, conseguían establecer correlaciones de las parejas de palabras que habían escuchado mientras dormían.
Además, los investigadores demostraron que para el aprendizaje fuera eficaz se requería que la escucha se efectuara durante el sueño profundo, en el que los registros eran de onda lenta justo antes de despertar.
El futuro de estas terapias es fascinante y muy prometedor. Ello implicaría que nuestro cerebro estaría a la caza de nuevos aprendizajes incluso mientras dormimos.
¿Quién sabe si se podría estar durmiendo plácidamente mientras nuestro cerebro se estimula en lugar de estar estudiando por la noche en la víspera de un examen?
Para saber más, visita mi blog: www.raquelmarin.net
HUFFINGTON POST, Martes 26 de febrero de 2019

Comentarios

Entradas populares de este blog

«Los buenos modales no están de moda, pero es imprescindible recuperarlos»

FERNANDO CONDE Hoy en día es frecuente enterarte por los medios de noticias relacionadas con la falta de respeto, el maltrato, el acoso, etc. Podemos observar muchas veces la ausencia de un trato adecuado a los ancianos, la agresividad incontrolable de algunos hinchas de fútbol; la poca estima a la diversidad de opiniones; la destrucción del medio ambiente; el destrozo del mobiliario urbano y un largo etcétera que conviene no seguir enumerando para no caer en el pesimismo que no conduce a nada y el problema seguirá ahí. Un problema que podríamos resumir en que se ha ido perdiendo el valor de la dignidad humana en general. Los modos para alcanzar la felicidad, siempre deseada, se apartan de las reglas y normas de conducta más elementales de convivencia colectiva que han acumulado las culturas y los pueblos a través de los siglos. La idea de que «la dignidad empieza por las formas» que resume este artículo es una afirmación bastante cierta, porque la forma, no pocas veces arrastr

¿Qué hay detrás de las mentiras de un niño?

ISABEL SERRANO ROSA Los niños no son mentirosos, pero mienten . Lo hacen cuando tienen algo que decir o que aprender. Hasta los cuatro años, con sus historietas sorprendentes, quieren narrarnos su mundo de fantasía. Somos la pantalla en la que proyectar su película. Entre los cuatro y los siete años construyen su mini manual de moralidad con ideas muy sencillas sobre lo que está bien y mal, basado en sus experiencias "permitido o no permitido " en casa y en el colegio. Con su gran imaginación, las mentiras son globos sonda para saber hasta dónde pueden llegar. Entre los ocho y los 12 años la realidad se abre camino y la fantasía se vuelve más interesada.  El pequeño pillo de nueve años desea ser bueno, pero se le escapan las trolas por el deseo de gustar a los demás, ocultar alguna debilidad o evitar castigos. En general, mienten a sus crédulos coetáneos o, por el contrario, les escupen a la cara alguno de sus descubrimientos del trabajo de campo que significa crecer.

Qué le pasa a tu bebé cuando dejas que llore sin parar

  GINA LOUISA METZLER Muchos padres creen que es útil dejar llorar a su bebé. La sabiduría popular dice que unos minutos de llanto no le hacen daño, sino que le ayudan a calmarse y a coger sueño. Se trata de la técnica de la espera progresiva , que fue desarrollada por el doctor Richard Ferber, neurólogo y pediatra de la Universidad de Harvard en el hospital infantil de Boston (Estados Unidos) , y que sigue utilizándose en la actualidad en todo el mundo. Casi nadie sabe en realidad lo que ocurre a los bebés cuando siguen llorando, pero las consecuencias físicas y psíquicas podrían afectarles toda su vida. Cuando un bebé llora sin que sus padres lo consuelen, aumenta su nivel de estrés , ya que, a través de su llanto, quiere expresar algo, ya sea hambre, dolor o incluso necesidad de com