«Papel», la obra de teatro que invita a reflexionar sobre el acoso escolar

MÓNICA SETIÉN

Ventrículo Veloz es una joven productora de teatro que se ha propuesto llevar a cabo una forma alternativa para alcanzar al público juvenil. Han puesto en marcha la obra «Papel» con la que quieren concienciar a los adolescentes sobre la lacra que supone el acoso escolar y el papel que deben tomar ellos ante un caso de bullying. José Padilla es el autor y director.

-¿Cómo surgió la idea de escribir una obra de teatro sobre el acoso escolar?

Parte de la idea fue de la productora Ventrículo Veloz, que se puso en contacto conmigo porque querían hacer teatro para adolescentes, de hecho es la línea en la que la productora está encaminada. Me propusieron escribir una obra que girara en torno al acoso escolar. Acepté encantado. El reto me sedujo porque, si bien había tocado el tema de la adolescencia en alguna de mis obras, no había hecho ninguna pensando en ese mundo concretamente.

-Para escribirla, ¿habló con adolescentes, se informó en internet...?

Me informé muchísimo. De hecho fue muy duro. Sabía que el tema era difícil y había que ser sensible y tratarlo con cautela, pero al empezar a conocer las historias de adolescentes que han sido víctimas, me fue complicado escribir como ningún texto en mi carrera. Hubo días en que el dolor que me causaba era tanto, que tuve que detener el ritmo de escritura para asimilar todas aquellas historias. Analicé muchos casos.

¿Se ha encontrado con algún caso cercano?

No. De hecho me ofrecieron la posibilidad de hablar con padres de niños que se habían quitado la vida, pero preferí no hacerlo. No por que su punto de vista no fuera interesante y elocuente, que lo es en una medida infinita, sino porque me hubiera quitado perspectiva, que creo que es lo que un dramaturgo debe tener.

¿Cuál es la finalidad de la obra?

La obra es una invitación a la reflexión porque, aunque por fortuna, la sociedad empieza a conocer la dimensión que tiene el problema, queda muchísimo por hacer. Aportamos nuestro granito de arena, porque todos, como sociedad somos responsables del acoso y debemos ser conscientes. Por otra parte, hemos huido de adoctrinar a nadie.

¿Por qué el título de «Papel»?

Esta obra está construida a través de tres sucesos reales de acoso escolar. Uno de ellos fue determinante porque fue el que puso el termino «bullying» sobre la mesa porque la víctima acabó suicidándose. Fue el caso de un chico que un día tuvo un episodio de diarrea en clase, y a partir de ahí aguantó todo tipo de vejaciones. Un año después, se encontró su aula forrada de papel higiénico. Fue una escenografía perversa, muy teatral y terrible. Esa imagen me pareció tremenda, pero útil para hacer llegar la reflexión que queremos hacer llegar.

Los adolescentes pueden ser crueles...

Pueden ser crueles, pero también son seres bellísimos. La adolescencia es un periodo muy delicado en el que los chicos se están abriendo al mundo, haciéndose adultos y tomando una serie de decisiones. Algunas de estas decisiones pueden ser equivocadas, pero creo, que si les orientamos, la reflexión les hace darse cuenta de que según que tipo de comportamiento puede ser tremendamente dañino...

¿Cómo responde el publico?

Muy bien. Se está haciendo en varios colegios y la respuesta está siendo fantástica. Los muchachos dicen que la función les atrapa y les llega la invitación a reflexionar. Esto para mí es el gran logro. Tras la representación hacemos un pequeño debate y los chicos entienden todo lo que les proponemos. Los adolescentes participan de lo que ven y se llevan sus conclusiones a casa. Y eso es fenomenal.

¿Cuentan con la opinión de los chicos para futuras obras teatrales?

Cada vez se hace más teatro dirigido a los adolescentes. Creo que ha habido años por parte de la profesión entera en los que no se les trataba, o se hacía con condescendencia. Nosotros nos hemos esforzado en no caer en este error con nadie y mucho menos a ellos, porque es muy difícil colársela a un adolescente. No se dejan tomar el pelo, saben lo que les gusta y lo que no, aunque no lo sepan verbalizar... Creo que, poco a poco, con propuestas como «Papel» y con otras parecidas, se barre esa condescendencia que no ayuda a nadie, y menos, a ellos.

ABC, 24/03/2017

«Los buenos modales no están de moda, pero es imprescindible recuperarlos»

FERNANDO CONDE Hoy en día es frecuente enterarte por los medios de noticias relacionadas con la falta de respeto, el maltrato, el acoso, etc. Podemos observar muchas veces la ausencia de un trato adecuado a los ancianos, la agresividad incontrolable de algunos hinchas de fútbol; la poca estima a la diversidad de opiniones; la destrucción del medio ambiente; el destrozo del mobiliario urbano y un largo etcétera que conviene no seguir enumerando para no caer en el pesimismo que no conduce a nada y el problema seguirá ahí. Un problema que podríamos resumir en que se ha ido perdiendo el valor de la dignidad humana en general. Los modos para alcanzar la felicidad, siempre deseada, se apartan de las reglas y normas de conducta más elementales de convivencia colectiva que han acumulado las culturas y los pueblos a través de los siglos. La idea de que «la dignidad empieza por las formas» que resume este artículo es una afirmación bastante cierta, porque la forma, no pocas veces arrastr...

Qué le pasa a tu bebé cuando dejas que llore sin parar

GINA LOUISA METZLER Muchos padres creen que es útil dejar llorar a su bebé. La sabiduría popular dice que unos minutos de llanto no le hacen daño, sino que le ayudan a calmarse y a coger sueño. Se trata de la técnica de la espera progresiva , que fue desarrollada por el doctor Richard Ferber, neurólogo y pediatra de la Universidad de Harvard en el hospital infantil de Boston (Estados Unidos) , y que sigue utilizándose en la actualidad en todo el mundo. Casi nadie sabe en realidad lo que ocurre a los bebés cuando siguen llorando, pero las consecuencias físicas y psíquicas podrían afectarles toda su vida. Cuando un bebé llora sin que sus padres lo consuelen, aumenta su nivel de estrés , ya que, a través de su llanto, quiere expresar algo, ya sea hambre, dolor o incluso necesidad de...

¿Qué hay detrás de las mentiras de un niño?

ISABEL SERRANO ROSA Los niños no son mentirosos, pero mienten . Lo hacen cuando tienen algo que decir o que aprender. Hasta los cuatro años, con sus historietas sorprendentes, quieren narrarnos su mundo de fantasía. Somos la pantalla en la que proyectar su película. Entre los cuatro y los siete años construyen su mini manual de moralidad con ideas muy sencillas sobre lo que está bien y mal, basado en sus experiencias "permitido o no permitido " en casa y en el colegio. Con su gran imaginación, las mentiras son globos sonda para saber hasta dónde pueden llegar. Entre los ocho y los 12 años la realidad se abre camino y la fantasía se vuelve más interesada. El pequeño pillo de nueve años desea ser bueno, pero se le escapan las trolas por el deseo de gustar a los demás, ocultar alguna debilidad o evitar castigos. En general, mienten a sus crédulos coetáneos o, por el contrario, les escupen a la cara alguno de sus descubrimientos del trabajo de campo que significa crecer....

El blog de Diego

Buscar este blog