Ir al contenido principal

¿Cuánto tiempo dedicar a la comida?

Esta una pregunta práctica y concreta que muchas familias se plantean. ¿Cuánto tiempo deben estar los niños en la mesa comiendo? ¿hasta que se lo comen todo? ¿Una hora, dos?
 En esta entrada les voy a ofrecer unas orientaciones sobre estas cuestiones.

DE QUÉ ESTAMOS HABLANDO

La pregunta se la suelen hacer familias en las que el tiempo dedicado a la comida suele ser interminable. Hay hogares en los que el almuerzo comienza las dos y media, y son las cuatro de la tarde y todavía están en ello.
Como muchas actividades y hábitos de los niños debe tener un principio y fin claramente definido.

CUÁNTO TIEMPO

Media hora es más que suficiente para la comida en familia y puede considerarse el tiempo promedio. Prolongarlo más allá, suele ser contraproducente.
En media hora hay tiempo de sobra para hacer una comida tranquila. La mayoría de las familias optan por un plato único y un postre. En otras, hay dos platos y el postre. En cualquiera de los casos, la media hora señalada es un tiempo adecuado para comer.
Se le ofrece la comida, se retiran las distracciones y no se le insiste ni se le obliga. Cuando no quiere más, no se hacen comentarios despectivos, ni lamentos. Pasado el tiempo se retira la comida tranquilamente.
Si ha comido poco no se le ofrece un postre más abundante para compensar, sino la cantidad que estuviera prevista, por ejemplo, media pieza de fruta.
Si no quiere comer más porque quiere ir a ver su programa de televisión o a jugar, debemos procurar que permanezca al menos, un cuarto de hora en la mesa, conversando con los demás mientras el almuerzo termina.
Pasado el tiempo, la comida se da por concluida, tanto si ha comido mucho como sí no ha comido nada.

Y SI NO HA COMIDO LO SUFICIENTE

Es posible que cuando pongan en práctica esta técnica, el niño o niña coma menor cantidad y tengan la sensación las primeras veces de que no ha comido nada. Probablemente suceda y esta circunstancia cambiará conforme vayan aplicando estas medidas.
Simplemente lo que tendremos que hacer es esperar a la siguiente comida, la merienda. En ella le ofreceremos una merienda habitual, no aumentaremos la cantidad para compensar. Es decir, que continuamos la rutina en el resto de comidas del día.

EVITAR

Lo que sí es clave es no ofrecer ni dejar al niño comer entre comidas, por tanto, que no tome alimentos desde el almuerzo a la merienda, aunque tenga hambre.
Por supuesto, esto funcionará si el niño ha estado sin comer entre una hora y hora y media antes del almuerzo. Es decir, que tomó un tentempié a media mañana y que no ha comido o picado antes del almuerzo, especialmente chucherías que tienen un gran efecto saciante.

FAMILIA Y COLE 
Imagen: Diego 19/08/2012

Comentarios

Entradas populares de este blog

«Los buenos modales no están de moda, pero es imprescindible recuperarlos»

FERNANDO CONDE Hoy en día es frecuente enterarte por los medios de noticias relacionadas con la falta de respeto, el maltrato, el acoso, etc. Podemos observar muchas veces la ausencia de un trato adecuado a los ancianos, la agresividad incontrolable de algunos hinchas de fútbol; la poca estima a la diversidad de opiniones; la destrucción del medio ambiente; el destrozo del mobiliario urbano y un largo etcétera que conviene no seguir enumerando para no caer en el pesimismo que no conduce a nada y el problema seguirá ahí. Un problema que podríamos resumir en que se ha ido perdiendo el valor de la dignidad humana en general. Los modos para alcanzar la felicidad, siempre deseada, se apartan de las reglas y normas de conducta más elementales de convivencia colectiva que han acumulado las culturas y los pueblos a través de los siglos. La idea de que «la dignidad empieza por las formas» que resume este artículo es una afirmación bastante cierta, porque la forma, no pocas veces arrastr

Qué le pasa a tu bebé cuando dejas que llore sin parar

  GINA LOUISA METZLER Muchos padres creen que es útil dejar llorar a su bebé. La sabiduría popular dice que unos minutos de llanto no le hacen daño, sino que le ayudan a calmarse y a coger sueño. Se trata de la técnica de la espera progresiva , que fue desarrollada por el doctor Richard Ferber, neurólogo y pediatra de la Universidad de Harvard en el hospital infantil de Boston (Estados Unidos) , y que sigue utilizándose en la actualidad en todo el mundo. Casi nadie sabe en realidad lo que ocurre a los bebés cuando siguen llorando, pero las consecuencias físicas y psíquicas podrían afectarles toda su vida. Cuando un bebé llora sin que sus padres lo consuelen, aumenta su nivel de estrés , ya que, a través de su llanto, quiere expresar algo, ya sea hambre, dolor o incluso necesidad de com

¿Qué hay detrás de las mentiras de un niño?

ISABEL SERRANO ROSA Los niños no son mentirosos, pero mienten . Lo hacen cuando tienen algo que decir o que aprender. Hasta los cuatro años, con sus historietas sorprendentes, quieren narrarnos su mundo de fantasía. Somos la pantalla en la que proyectar su película. Entre los cuatro y los siete años construyen su mini manual de moralidad con ideas muy sencillas sobre lo que está bien y mal, basado en sus experiencias "permitido o no permitido " en casa y en el colegio. Con su gran imaginación, las mentiras son globos sonda para saber hasta dónde pueden llegar. Entre los ocho y los 12 años la realidad se abre camino y la fantasía se vuelve más interesada.  El pequeño pillo de nueve años desea ser bueno, pero se le escapan las trolas por el deseo de gustar a los demás, ocultar alguna debilidad o evitar castigos. En general, mienten a sus crédulos coetáneos o, por el contrario, les escupen a la cara alguno de sus descubrimientos del trabajo de campo que significa crecer.