M.J.PÉREZ-BARCO
ABC, 26/01/2016
A la espera de que el Ministerio de Educación ultime el Plan Estratégico de Convivencia Escolar
, que pretende luchar contra el
«bullying» y «ciberbullying» y cuyo impulso queda supeditado a la formación de
un nuevo Gobierno, parte de la comunidad educativa ya ha tomado la
iniciativa para combatir este fenómeno que se está extendido por gran
parte de colegios e institutos de España. Son ya muchos los profesores y
equipos docentes que se forman en la prevención y detección del «bullying», una
realidad silenciosa que sale a la luz pública con casos como el de Diego, un
niño madrileño de 11 años que se suicidó por posible acoso escolar.
De centros privados, públicos y concertados, laicos y religiosos, de todos
los puntos del país, los profesores quieren y piden formación, conscientes de
que son una pieza clave para prevenir, detectar y detener esta cruel lacra. «El
profesor debe saber diferenciar lo que es una broma de lo que puede ser un
incipiente caso de acoso escolar. Por eso, es necesario que reciba
formación y estrategias para detectarlo. Hay que sensibilizar al profesorado,
porque el "bullying" es una realidad, y podemos afrontarlo. Todavía
se escucha mucho eso de "en mi centro no pasa o sólo ocurrió una
vez"», afirma Mª Carmen Crespo, responsable de protección
de datos en el Colegio salesiano Sagrado Corazón de Jesús de Las Palmas de Gran
Canarias. Esta docente está recibiendo formación desde el Instituto para la Competencia Digital
sobre prevención del acoso escolar y del «ciberbullying», así como sobre otros
riesgos que acechan a la comunidad educativa en el mundo digital. Su misión
será formar a otros maestros que se encargarán de concienciar a los alumnos.
Una tarea, cuanto menos, complicada, porque como asegura Crespo «el
profesor se siente perdido e inseguro. Tenemos los protocolos de
actuación de las Comunidades Autónomas para estos casos, pero son líneas
generales. La familia no siempre es capaz de detectar signos y detalles de lo
que está ocurriendo y los alumnos no disponen de las herramientas para dar a
conocer sus casos», añade.
Pistas en la convivencia
Los docentes conviven muchas horas día a día con los alumnos, durante los
nueve meses que dura un curso escolar... «En la convivencia en un centro
educativo se producen conflictos, situaciones insignificantes, pequeñas cosas
que dan mucha información a los tutores. Hay muchas pistas que el profesorado
recibe y que pueden dar indicios de que existe acoso», explica Elena
Piñana, profesora de Primaria en el Colegio Ceu San Pablo Sanchinarro
de Madrid. Esta institución ha puesto en marcha este año un
programa de prevención de la violencia y del «bullying» que recibirán más
de 5.000 alumnos.
Piñana trabaja con los chicos de su clase en la elaboración de un decálogo
de buen comportamiento que todos se comprometen a cumplir, e incluso ellos
mismos deciden las sanciones para quien no lo haga .«En estas sesiones el tutor
percibe si alguno de ellos puede sufrir acoso, o si ha visto algo... Solo el
hecho de que un alumno participe en exceso o en defecto da pistas», asegura.
Ejemplos de centros educativos preocupados y comprometidos en la lucha
contra el «bullying» se dan por toda nuestra geografía. Fuera del horario
lectivo, profesores del Colegio Gaudem de Madrid también reciben formación por
parte del Instituto para la Competencia Digital para prevenir este fenómeno.
En este caso, han apostado, además, por la educación en valores desde la etapa
Infantil. «Trabajamos la resolución de conflictos, la empatía, las emociones...
durante clase, en la asamblea... y si es necesario dejamos los contenidos e
insistimos sobre ello», señala Natalia Casco, profesora de este centro.
Una de las reivindicaciones de los docentes es que desde la
universidad se instruya a los futuros maestros no sólo en la detección del acoso
escolar sino también en la prevención, como señala Sonia García,
secretaria de comunicación del sindicato de profesores ANPE. «Nos llaman
profesores y docentes preocupados para saber qué pasos seguir y cómo actuar
cuándo detectan casos de este tipo. El profesor está motivado y
comprometido en acabar con el "bullying" en las aulas»,
afirma.
Formación en la universidad
El asunto ya se trata en diversas facultades de Educación. José
Antonio Luengo lleva más de una década formando a futuros maestros.
Ahora imparte clase en la
Facultad de Educación de la Universidad Camilo
José Cela y se queja de que «falta formación uniforme al profesorado para que
puedan explicar de qué se trata el acoso escolar».
«Es muy importante concienciar del acoso escolar a los alumnos de
magisterio —dice—, porque esa sensibilidad la llevarán al aula. Deben
tener herramientas y estrategias para detectarlo, intervenir y prevenirlo». Y
es que, como explica este profesor universitario, «el papel de docente no es
sólo impartir contenidos, tiene también la responsabilidad de un tutor y el
compromiso de garantizar el bienestar intelectual y emocional del alumno»a.
El desarrollo de la inteligencia emocional, la educación en valores y la
promoción de la convivencia pacífica a través de actividades y de forma
continua en los centros son sus claves para prevenir el «bullying».
Pero también la atención del profesor, asegura: «Debe fijarse si el
alumno tiene poca relación con los compañeros, si es tímido, si manifiesta
signos de tristeza, si está siendo excluido del grupo, hay que estar pendiente
si juega con los demás en el recreo, si le tienen en cuenta cuando se toman
decisiones en grupo, si habla...».
Dónde acudir
Fundación ANAR: El Teléfono ANAR de Ayuda a Niños y
Adolescentes es gratuito y confidencial. Atendido por psicólogos durante todo
el año: 900 20 20 10.
Protégeles: 91 74 00 019 es el teléfono de Protégeles para
denunciar situaciones de acoso escolar y «ciberbullying».
Policía Nacional: seguridadescoalr@policia.es es la cuenta
de correo electrónico habilitada por la Policía Nacional
para denunciar casos de acoso bien si eres víctima o testigo o conoces o
sospechas de que alguna persona lo sufre.
ABC, 26/01/2016
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