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Cómo cambiará la vida tras la pandemia: "Las ciudades se van a reconstruir alrededor del barrio"

EMILIO ORDIZ

Vivimos en la era de lo inmediato, de la tecnología, de los viajes baratos y de unas ciudades cada vez más masificadas. Pero entonces llega una pandemia y las cosas cambian: los ciudadanos buscan pisos con terraza, se potencia el mundo rural y el turismo podría cambiar en el corto plazo. El coronavirus modifica la vida de las personas, y las grandes urbes serán las que más noten los cambios en diferentes aspectos. ¿Cómo serán en el corto plazo?

Hace un mes, los alcaldes de las siete grandes ciudades pidieron al Gobierno destinar su superávit "sin limitaciones" a luchar contra el virus. Solicitan "un cambio del marco financiero global" y "el respaldo" tanto del Ejecutivo como de las autonomías para contar con "capacidad y recursos" para atajar la crisis de la Covid-19 ejerciendo "un papel imprescindible al servicio de los vecinos y las vecinas".

Frente a la parte económica, la crisis y sus efectos dejan varias aristas. Turismo, sostenibilidad y lucha contra el cambio climático, vivienda y la propia evolución de la pandemia en las principales urbes coinciden en el mismo espacio, y varios expertos consultados se aventuran a dibujar qué ciudades tendremos en la próxima década.

"No sé si la gente va a aguantar mucho con mascarilla"

El primer nivel a mirar es el sanitario. En este sentido, el virólogo Juan José Badiola explica a 20minutos que la situación mejorará en el corto plazo. "Espero que el número de contagios caiga drásticamente en verano", pero avisa de que especialmente en las urbes importantes "habrá que seguir con las medidas que tenemos ahora ya instaladas" en la sociedad. Pone varios ejemplos: "Los espectáculos serán limitados y las universidades impartirán las clases en modelo semipresencial".

Badiola lo tiene claro. "Vamos a tener un buen verano", comenta. Mientras no haya vacuna, las medidas de distanciamento y de higiene seguirán vigentes, pero el experto es más escéptico respecto a otras: "No sé si la gente va a aguantar mucho tiempo con mascarilla". En su opinión, los ciudadanos dejarán de usarla "cuando vean que el riesgo se ha reducido", sobre todo en los espacios abiertos, aunque "sí la veremos en el transporte y demás espacios cerrados". El doctor ve "muy poco futuro" al uso de la mascarilla.

"Se va a dar más valor al entorno cercano"

¿Cómo nos vamos a mover por las ciudades? Esa es otra de las grandes cuestiones. "Se van a reconstruir alrededor del barrio", expresa el director del City Lab del IED Madrid, José Francisco García. "No tiene sentido que tengamos que trasladarnos kilómetros para hacer lo que queremos hacer" por lo que "se pondrá en valor el entorno cercano". Eso sí, García considera "irreal" hablar de las ciudades "de 15 minutos" porque "el trabajo lo tenemos en un sitio y vivimos en otro".

"Vamos a acabar reformulando la escala de ciudad, rehuyendo ya de hablar de megaciudades y hablando de una ciudad más humana", comenta el experto en urbanismo que ve claro "un cambio en el modelo de movilidad", ya que el espacio para las personas se genera "ocupando más las calles" y el destinado hasta ahora para los coches". Es un hecho que habrá "menos metros físicos de oficina". Esto "transforma radicalmente el ocio y la vida familiar".

En palabras de José Francisco García "habrá un cambio de hábitos, necesidades y consumos" por lo que se van a generar "más espacios públicos al aire libre", y por eso hay que ver "como conseguimos que haya más espacio para las personas".

"Ha quedado patente una necesidad de más espacio en las viviendas"

"La ciudad que surja de la pandemia deberá apostar por la rehabilitación de los edificios, pero también del espacio público para garantizar el bienestar". Con esas palabras se refiere la decana del Colegio de Arquitectos de Madrid, Belén Hermida. ¿Cómo estará distribuido el espacio público? Para Hermida, el confinamiento ha dejado patente "una necesidad de más espacio en las viviendas y quizás menos en las oficinas, ahora que se ha acelerado el desarrollo del teletrabajo". Habla también de un cambio normativo que permita "los usos mixtos, en todos los ámbitos de la urbe". En conclusión, un "reordenamiento urbano".

La decana pone el ejemplo de Madrid. "Ya es una ciudad de escala media con un potencial enorme, una ciudad que puede convertirse en referente mundial y cuyo activo principal son sus propios ciudadanos". En este sentido, da unas claves de cara al futuro a corto plazo: "Reinventar la movilidad, potenciar el teletrabajo, apostar por la rehabilitación del entorno construido, incorporar el verde productivo al día a día o diversificar la oferta de servicios son algunos de los aspectos a desarrollar".

Eso sí, hay deberes que hacer. "La capital necesita abordar sin miedo y de inmediato políticas que minimicen la contaminación y potencien el deporte y la actividad física", comenta Hermida, que concluye que la principal apuesta debe darse a la hora de "repensar la movilidad de los ciudadanos" y apostar "por el transporte público limpio".

"Madrid o Barcelona tardarán más en recuperar el turismo"

Uno de los valores principales en la sociedad actual es el turismo, que también verá sus planes trastocados tras la pandemia. El concepto cambiará, al menos mientras no haya tratamiento para el virus. "Los movimientos en el sector turístico en el corto plazo, van a estar caracterizados por los viajes de proximidad, evitando los lugares con gran afluencia de gente", cuenta el secretario general de la Mesa de Turismo, Carlos Abella, quien además reconoce que ciudades como Madrid y Barcelona "tardarán más en recuperarse que otros destinos de naturaleza, interior, costas...".

"Esto va a obligar a estos destinos a reinventarse para adaptarse a las nuevas necesidades de los clientes, donde primará por encima de todo, la seguridad", prosigue. El turismo del futuro será "muy diferente al actual" porque "la necesidad de evitar el contacto físico acelerará la implementación de soluciones tecnológicas, que el sector ya venía llevando a cabo".

Entra en juego también la tecnología, sostiene Abella. "El móvil se convertirá en un elemento fundamental para realizar el check in en aeropuertos y hoteles, será la llave de nuestra habitación, solicitaremos la comida, permitirá realizar la trazabilidad de los movimientos, entre otras cosas". El secretario general, eso sí, tiene claro que el sector está preparado: "Lo que sí es seguro es que el sector turístico sabrá adaptarse a esta nueva realidad y todas estas innovaciones tecnológicas no podrán sustituir nunca la verdadera esencia del sector turístico". Y es que "la vocación de servicio, la calidad y la hospitalidad seguirán caracterizando al sector turístico español".

"La gran ciudad tiene la ventaja de la conectividad y la creatividad"

En un nivel más global, el investigador de Elcano, Andrés Ortega, explica que el cambio no va a ser tan drástico como pensamos. "El concepto de ciudad va a cambiar en el corto plazo, pero no en el medio o en el largo", expresa. El motivo es que "la gran ciudad tiene una ventaja que estamos viendo estos días que es, por un lado, la conectividad, y eso lleva también a que hay también más creatividad y más oferta de empleo, sobre todo ante la cuarta revolución industrial".

"Eso va a seguir, aunque momentáneamente se deje de utilizar el transporte público, por ejemplo", prosigue el analista, que se refiere también al hecho de que "el teletrabajo se está impulsando de manera definitiva en el caso de las grandes empresas", como en el caso de Facebook. "Eso va a llevar también a que la gente se vaya a vivir a sitios más baratos, fuera de los centros de las grandes ciudades, pero eso puede llevar a un déficit de creatividad, porque el encontrarse también la fomenta", termina.

20 MINUTOS, Lunes 25 de mayo de 2020


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